La Constitución española, promulgada el 6 de diciembre de 1978, es el cuerpo legal fundamental que rige el funcionamiento del Estado español. Esta Constitución se divide en dos partes principales: la parte orgánica y la parte dogmática. En este artículo, exploraremos en detalle cada una de estas partes y su importancia en el sistema político y jurídico de España.
¿Qué es la parte orgánica de la Constitución española?
La parte orgánica de la Constitución española se refiere a la estructura y el funcionamiento de los diferentes órganos e instituciones del Estado. Establece las normas y los procedimientos para la elección de los representantes del pueblo, la creación y modificación de leyes, así como la organización del poder ejecutivo, legislativo y judicial.
La organización del poder ejecutivo
En la parte orgánica de la Constitución española se detalla la composición y las competencias del poder ejecutivo. El jefe de Estado es el rey o la reina de España, quien representa la unidad del país y arbitra el funcionamiento regular de las instituciones. Además, se establece que el gobierno, encabezado por el presidente del gobierno, es el órgano colegiado que dirige la política nacional y administra los asuntos del Estado.
El poder legislativo y el parlamento
La parte orgánica de la Constitución también establece el poder legislativo, el cual recae en las Cortes Generales, compuestas por el Congreso de los Diputados y el Senado. El Congreso representa al pueblo español y es elegido por sufragio universal, mientras que el Senado representa a las comunidades autónomas y a los territorios no peninsulares.
Se establece que la aprobación de leyes es competencia del poder legislativo y que estas deben ser promulgadas por el rey o la reina. Además, se establecen los procedimientos para la creación y modificación de leyes, garantizando la participación de todas las fuerzas políticas y la transparencia en el proceso legislativo.
La organización del poder judicial
En cuanto al poder judicial, la parte orgánica de la Constitución establece un sistema judicial independiente y garantiza la igualdad de todos ante la ley. Se establece el Tribunal Constitucional, encargado de velar por el cumplimiento de la Constitución y resolver los conflictos de competencia entre los diferentes órganos del Estado.
Además, se establece la existencia del Consejo General del Poder Judicial, encargado de garantizar la independencia de los jueces y magistrados, y se detallan las competencias de los diferentes tribunales y su organización jerárquica.
¿Qué es la parte dogmática de la Constitución española?
La parte dogmática de la Constitución española se refiere a los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos. Establece los principios éticos y políticos que deben regir la convivencia en sociedad, así como los derechos individuales y colectivos que deben ser protegidos por el Estado.
Los derechos fundamentales
La parte dogmática de la Constitución española reconoce y protege una amplia lista de derechos fundamentales, como la libertad de expresión, el derecho a la vida, a la integridad física y moral, y a la libertad de conciencia y religión. También garantiza la igualdad ante la ley, la no discriminación por razón de sexo, raza, religión o cualquier otra condición, y el derecho a la tutela judicial efectiva.
Además, se reconocen los derechos y libertades de índole social, como el derecho a la educación, la protección de la salud, el derecho al trabajo, a la vivienda digna y a la seguridad social. Estos derechos se consideran fundamentales para el desarrollo integral de las personas y para la construcción de una sociedad justa y equitativa.
Los valores superiores del ordenamiento jurídico
La parte dogmática de la Constitución también establece los valores superiores del ordenamiento jurídico, entre los que se destacan la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político. Estos valores son fundamentales para garantizar la convivencia democrática y el respeto a los derechos fundamentales de todos los ciudadanos.
En resumen, la Constitución española se divide en dos partes principales: la parte orgánica y la parte dogmática. La parte orgánica establece la estructura y el funcionamiento de los órganos e instituciones del Estado, mientras que la parte dogmática reconoce y protege los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos. Ambas partes son fundamentales para garantizar el buen funcionamiento del sistema político y jurídico de España y para preservar los valores democráticos y éticos en la sociedad.
Preguntas frecuentes
¿Cuándo se promulgó la Constitución española?
La Constitución española fue promulgada el 6 de diciembre de 1978.
¿Cuáles son los valores superiores del ordenamiento jurídico según la Constitución española?
Los valores superiores del ordenamiento jurídico según la Constitución española son la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político.
¿Cuáles son los derechos fundamentales reconocidos por la Constitución española?
La Constitución española reconoce derechos fundamentales como la libertad de expresión, el derecho a la vida, a la integridad física y moral, y a la libertad de conciencia y religión, entre otros.